domingo, 18 de noviembre de 2012

Lo difícil

Cuando finalizaron las clases, le envíe un mensaje a Alejandro, que decía : "Amor, tengo algo muy importante que decirte. Necesito verte. Te veo en la salida en 10 minutos. Te amo". Fui directo a la salida y ahí estaba él. Le di un fuerte abrazo y un gran beso. No sabía por dónde empezar. Lo primero que le dije fue: 

- Hoy te llevaré a mi casa para presentarte a mis padres.
 - ¡wow! Por fin conoceré a mis suregritos.
¡Aaa! Ni siquiera se imaginaba lo difícil que sería .Después fui al grano y sin pensar en las consecuencias le dije: 
- Mi familia y yo somos adinerados.
- ¿Y?
No podía creerlo,sólo eso iba a decir.
- ¿Acaso no te molesta, no te importa?.
- ¿Crees que me  interesa tu dinero?
- No lo sé.
- Tal vez no parezcamos la pareja ideal, pero en contra de lo que el mundo entero pueda pensar, tu y yo somos uno y así vamos a estar. Cuando se ama de verdad no importa la clase social. Lo único que importa es que nos amamos.
- Te amo - le dije entre lágrimas -. Pero mi madre no lo aceptará.
- Lo que digan los demás no importa nada. Todo lo vamos a superar.

Nuestra plática terminó y nos pusimos en marcha. Cuando llegamos a mi casa, los empleados nos recibieron con gran entusiasmo, pero Anacleta me miró con incertidumbre y me dijo: "Tu madre se pondrá furiosa, niña". Su comentario en vez de ayudarme me puso más nerviosa de lo que ya estaba.

Después de  esperar por un largo tiempo en la sala a que mi mamá bajara de su habitación, llegó y lo primero que hizo fue despreciar a  Alejadro.

- ¿Quién es este naquito?- me dijo entre gritos - lo quiero fuera de esta casa ¡te lo dije! 
-Mamá por favor entiéndeme. Lo amo. No seas grosera.
- Señora, mi nombre es Alejandro. Es un placer conocerla- dijo muy amablemente como sí nada de eso le hubiera importado.

Mi mamá me puso una mirada horrible y se fue de ahí de inmediato advirtiéndome que no lo quería ver más. Alejandro me abrazó y me dijo:"no pasa nada, amor". 


domingo, 11 de noviembre de 2012

Como un sueño


Estaba nerviosa. Me puse mi atuendo más 
sencillo y bonito para impresionar a 
los padres de Alejandro. 


Al salir de 
mi casa, Anacleta (la muchacha de la 
limpieza) me vio y yo espantada solo le

dije: “¡shhh! Tú no me viste”. Salí muy
preocupada y corriendo para que nadie
más me viera.

Ya eran más de las seis de la tarde. Creo que me había 
retrasado un poco, bueno, no mucho,
solo una hora. Alejandro se encontraba 
ansioso y al verme sonrió y me abrazó. 
Cuando íbamos camino a su casa, con 
una sonrisa misteriosa, me dijo: "Mis 
papás saldrán al anochecer, así que 
estaremos solos". 
En mi mente solo 
pasaban pensamientos maravillosos. 





Cuando llegamos, la familia de 
Alejandro, muy amablemente, me invitó 
a pasar. La comida estaba lista, la 
mesa arreglada a la perfección y la 
atención por parte de ellos sobraba. 
Sus padres se presentaron ante mí. Mis 
nervios se habían calmado. Creí que me 
interrogarían a más no poder, pero no 
fue así. Después de haber terminado 
de comer el postre y de un tiempo de reposo, se levantaron de la mesa y se disculparon por no poder quedarse más tiempo, pues tenían un compromiso muy importante. La mirada de Alejandro cambió de serio-incómodo a sorprendido-feliz.




Cuando ellos se fueron, Alejandro me 
llevó a su recámara y comenzó a decirme 
las palabras más bonitas que nadie 
hubiese imaginado. Puso las canciones 
más románticas que existen y empezó a 
besarme. Parecía un plan perfectamente 
calculado. Sus labios rozaban mi cuerpo. 
Sus caricias, su voz, todo era tan

excitante. Se me fue la noche entera en 
ese gran momento: mi primera vez. Fue 
tan increíble.


En la mañana siguiente, me desperté 
de un gran susto, pues el despertador 
marcaba las cinco am. No podía creerlo.


Tenía que llegar antes de las siete de la mañana 
a mi casa para poder darme un baño,

cambiarme de ropa y para que mis padres 
no se dieran cuenta. Además, mi chofer 
siempre está a las siete horas en punto 
esperándome. 





Mi casa estaba casi al 
otro lado de la ciudad, y después de 
andar de camión en camión llegué a 
las seis y media de la mañana. Corrí a arreglarme. 
Afortunadamente no tuve problemas. Como 
si nada hubiese pasado me fui directo

a la escuela. Todo el camino estuve 
pensando en qué hacer. No sabía si 
presentarle a mis padres a Alejandro.


Al fin y al cabo, decidí hacerlo. Solo
había un problema más: ¿Cómo decirle que
soy adinerada? ¿Cuál será su reacción?

domingo, 4 de noviembre de 2012

Mis falsas creencias


Llevo muchos días sin poder salir de casa. A mi gran amor sólo lo puedo ver en la escuela. Ya estoy harta. Alejandro me ha invitado muchas veces a salir, pero como estoy castigada, le he inventado muchísimos pretextos: tengo clases de piano, clases de natación, saldré con mi madre de compras, se murió el perrito de mi prima, ya no sé que decirle. Me han dado muchas ganas de escaparme.

Mi padre, creo que ni enterado está de lo que esta sucediendo conmigo. A él casi no lo veo, si acaso algunas veces en la cena, y eso es muy raro. Según mi mamá él es un hombre muy ocupado, lleno de trabajo y sin tiempo para estar aguantando mis caprichitos. A veces lo extraño. Hay veces que quisiera que todo fuera como antes. Aún recuerdo cuando muy seguido nos íbamos todos de vacaciones a la playa, a la casa de Cuernavaca, o a visitar a los abuelos, y todo para mi era fabuloso, perfecto. Mi madre y mi padre eran tan lindos conmigo. Hoy en día ya ni siquiera se como es él (me refiero a su forma de ser).

Todo esté tiempo encerrada en mi casa me ha servido de mucho. He reflexionado y me he dado cuenta de lo mal que ha sido mi actitud durante todo este tiempo. Ahora, criticando a mi madre por como menosprecia a la gente pobre, me ha hecho ver que esta muy mal y que lo he estado yo también. Ella siempre me inculco sus pensamientos y hemos estado equivocadas durante mucho tiempo. 

Por no tener dinero, ropa de marca, autos de lujo, grandes y preciosas casas, joyas caras, no los hace para nada diferente a nosotros. Creó que sentimental y emocionalmente son mejores que nosotros. He tenido contacto con la gente de la servidumbre, ¡son tan buena gente!, Cuando me aburro me voy con ellos y me cuentan todas sus “pato aventuras”, así es como le llaman a sus historias. ¿Acaso todos serán igual de humildes y generosos?

Hoy mi madre salió de casa. Le llame a Alejandro para decirle que aceptaba su invitación para ir a comer a su casa. Me invito por que quería  presentarme a sus padres. El se emociono. Quedamos de vernos fuera de la escuela, el cual era un punto medio entre su casa y mi casa. Estaba muy nerviosa ¿Cómo me visto? ¿Les caeré bien? ¿Se darán cuenta mis padres de que no estoy en casa? No lo sé.

domingo, 28 de octubre de 2012

La traición.



Cuando llegue a mi casa después de mi cita con Alejandro, me tomó por sorpresa la espera de mi mamá. Me llamo a sentarme frente a ella. De repente se alteró muchísimo y comenzó a gritar cosas que yo ni al caso. Comenzó a cuestionarme ¿a dónde fuiste? ¿Con quién?  Yo me encontraba desubicada, no sabia que contestar por miedo a que se enterara que estuve con Alejandro, se enfurecería. Ella piensa que no tenemos que socializar con gente que no es de nuestra clase. Lo único que hice fue quedarme callada.

Mi mamá sonrió sarcásticamente y dijo: “A caso  me crees tonta, crees que no lo sé. Una señorita de tu clase no debería estar con gente pobretona, naca”.
Me puse más nerviosa de lo que ya estaba y solo dije: “Estaba con unos amigos,  y eso de que sean pobres no quiere decir que no puedan ser mis amigos”.

Después de un sin fin de desacuerdos, me fui a mi habitación. Sin importarme el conflicto que tuve con mi mamá comencé a recordar los momentos mágicos que pase en compañía de Alejandro, natasha  y mi nuevo amigo Gorge. Pero lo que no voy a olvidar nunca son los momentos que pase junto a Alejandro. Sus besos, sus caricias, sus cariños y sus románticas palabras.

Después todo eso se me olvido por un instante y una pregunta paso por mi mente ¿Quién le habrá dicho a mi mamá que salí con Alejandro ? Y recordando cada instante, olvide un momento que creí sin importancia. Cuando estábamos comiendo un helado en la plaza, me pareció a ver visto a kimberly saliendo  de una tienda de ropa, la verdad no le tome importancia, me dio igual.

No me iba a quedar con la duda, así que busque un pretexto para llamarla y preguntarle en donde se encontraba aquella tarde a las 4, que yo había estado tratando de comunicarme con ella y no me contestaba. Pero ella enseguida, se burló y me dijo: "Si llamas por lo de tu mamá, si, si fui yo la que le dijo. Es por tu bien".  Me puse furica y le colgué.

Me sentí tan mal, es mi amiga y me defraudo. Rompió la promesa que me había echo. Creo que no volveré a confiar en ella y no se sí seguirá siendo mi amiga.
En la noche, ya que creí se había calmado todo, mi mamá entro a mi cuarto y me dijo que no tendría permisos para salir excepto ir a la escuela y de regreso a la casa. 

domingo, 21 de octubre de 2012

El día tan esperado.

Hoy le he confesado a Alejandro mis sentimientos. Creí que para él seria algo extraño y que me rechazaría de inmediato, sin embargo respondió que sentía lo mismo por mi. Me sentí tan feliz. Fue ese nuestro primer gran día juntos.

Durante esta semana estuve saliendo como de costumbre con mis amigas. No estaba segura de confesarles la relación que tenia con Alejandro, pero en un impulso se los dije.

Kimberly y Dafne eran dos de mis amigas, las conocí en la prepa.Ellas de inmediato reaccionaron negativamente y me hacían creer que mis padres me matarían. Natasha, una amiga de la infancia, solo se quedo en silencio. Les hice prometer que no le diria a mis padres y entre risa y risa no tuvieron más opción que aceptar prometerlo. 

Mientras caminábamos por la plaza, Kimberly y Dafne no dejaban de molestarme, me reprochaban que no podía estar con alguien de tan baja clase. Decían que seguramente me volvería todo una naquita. Por un instante ellas se alejaron de Natasha y yo. Yo no pude evitar quedarme con la duda e incertidumbre de preguntarle el por qué de su silencio, el por qué no me dio algún consejo y simplemente no dijo nada. Minutos más tarde ella sin dudarlo me dijo que por ella no habría ningún problema, que ella me apoyaría en cualquier decisión que yo tomara. Lo único que a ella le importaba era verme feliz.

Me agrado muchísimo su respuesta y saber que cuento con ella. Eso no me sorprende ya que hemos sido grandes amigas desde muy pequeñas. Nuestras familias se conocen desde hace mucho tiempo, son de gran confianza. Hemos tenido muchas experiencias bonitas juntas.

Aun no puedo creer la actitud de Kimberly y Dafne. Creí que me apoyarían.

Mañana será mi primer cita con Alejandro. Iremos al cine y a comer un helado. Estoy nerviosa y algo insegura, pero también estoy con ansiedad esperando a que llegue ese gran día. No quisiera ni pensarlo, pero si es una trampa , y si quiere hacerme daño. Le llame a Natasha y le pedí que me acompañara y ella sin dudarlo acepto.

Por fin llego el día tan esperado. Afortunadamente Alejandro se encontraba acompañado de un amigo suyo. Creo que fue algo así como una cita doble porque a Natasha le gusto su amigo. Claramente esta que la pasamos increíble. Lo feo estuvo en el momento de la despedida. No quería que terminara ese momento.

domingo, 14 de octubre de 2012

Mi corazón

Hace un mes y medio ingresé a la Universidad Autónoma Metropolitana por obligación de mi padre. Yo quería estudiar en la UVM, pero como él es graduado de la UAM, aseguró que sería una buena opción y que así yo podría ser tan exitosa como él.

A pesar de tanto que le he pedido a mi padre que me cambie de Universidad, él se niega rotundamente a eso, así que me estoy resignando a tener que estudiar en la UAM.

El chofer de mis padres es quien me lleva siempre al colegio. Tengo que pedirle que me deje dos cuadras atrás para no estar soportando más molestias de parte de todos esos tipos. También porque sé que estando ahí tendría que socializar con todos ellos. Eso para nada es de mi agrado pero es necesario.

Seguramente si se enteraran de que mi familia y yo somos adinerados, algunos se interesarían en mi dinero y tal vez podrían hacerme daño. No lo sé, no estoy segura, pero eso no sería nada agradable.

Aún no me adapto a este colegio, y no creo hacerlo. Me desagrada estar rodeada de gente que no es de mi clase social. Pocos de ellos se imaginan que soy una chica adinerada. Lo creo por que a veces me hacen menos, me consideran prepotente, lo se porque he escuchado algunos comentarios. Claro que a mi no me afecta ni me importa.

Hay algo que me llama muchísimo la atención. Un chico de mi grupo llamado Alejandro, aun sin conocerme siempre trata de defenderme .

Cada día que pasa, me interesa más la actitud de Alejandro hacia mi. He tenido sensaciones extrañas. Cada vez que lo veo mi corazón se acelera. Es algo que nunca antes había sentido. ¿Por qué él?

Él es la única persona que me agrada ver por las mañanas. A veces me dan ganas de acercarme a saludarlo, pero mi madre cree que no es apropiado que alguien de mi clase se relacione con personas como él.

He notado que Alejandro también tiene un interés en mí. Su mirada me lo dice y cada día me invade más el deseo de acercarme a él. ¿Acaso es amor? No lo sé, pero creo que debo arriesgarme a descubrirlo.

Después de pensarlo todo el fin de semana, me di cuenta de que en realidad el interés que siento por él no es solo el de una amistad. Quiero algo mas con él y estoy dispuesta a intentarlo.

No puedo dejar de pensar en él, no puedo evitarlo.